Buenos Aires, 20 de junio de 2016
Queridos Hermanos y Hermanas de la Vida Consagrada:
Esta vez les escribo movido por el clima del Jubileo de la Misericordia, que con tanto fruto espiritual estamos celebrando. Este Año ha sido y es un regalo para sus comunidades y obras. Son muchas las propuestas y los signos que en torno a la misericordia queremos celebrar, festejar, acompañar y dar testimonio de esta maravillosa gracia de Dios. Este Dios rico en misericordia es quien nos invita a seguir a su Hijo y a imitarlo en sus gestos, palabras y actitudes, consagrando a Él nuestras vidas y confiando a su Corazón misericordioso nuestros sueños y esperanzas.
En este Año de la Misericordia he propuesto a la Arquidiócesis la realización de un Sínodo. Será un tiempo de gracia y de «caminar juntos» en la Iglesia de Buenos Aires. Estoy convencido de que una Iglesia sinodal renueva el entusiasmo y se prepara mejor para evangelizar; al mismo tiempo, nos disponemos a celebrar el IV Centenario de la creación de nuestra diócesis de la «Santísima Trinidad de Buenos Aires» (1620-2020). La rica variedad de carismas y el testimonio de ustedes en tantos frentes de la misión porteña, será un aporte fundamental para este camino sinodal; para ello contamos, como siempre, con la oración y la colaboración de todos los consagrados.
Como es costumbre, cada año celebramos la Misa para la Vida Consagrada, y por este motivo quiero invitarlos a un Encuentro con la Misericordia a realizarse el sábado 6 de agosto, fiesta de la Transfiguración del Señor, en el Colegio de las Hermanas de la Misericordia, Directorio 2138. La idea es encontrarnos y compartir la gracia de la Misericordia, a través de testimonios, videos, fotos, power point, etc. Deseo que dediquemos un tiempo para conocer nuestros carismas y, de un modo especial, aquellos que trabajan directamente en las obras de misericordia. El Encuentro comenzará a las 9.00 hs. Tendremos un espacio para presentar nuestras obras, y luego de una charla celebraremos la Eucaristía, compartiremos el almuerzo a la canasta y al finalizar, iremos en peregrinación a la Basílica de San José de Flores, para pasar por la Puerta Santa y obtener la gracia de la Indulgencia. Pensamos que alrededor de las 14.00 hs.concluiremos la jornada.
En ese día tendremos la posibilidad de programar juntos algunas obras de misericordia que podríamos hacer en fechas a convenir: visita a hospitales, residencias de mayores, centros de recuperación, varones y mujeres en situación de calle, institutos de menores, cárceles de mujeres y varones, o aquellos destinos que nos sugieran. Hay también, una propuesta de hacer juntos una «misión misericordiosa» por nuestros barrios de Buenos Aires. Este signo nos hará muy bien y será un testimonio de la presencia de todos nosotros en la vida y misión de la Iglesia. Los espero para celebrar juntos este Año Santo de la Misericordia y Reconciliación.
Con mi bendición y gratitud.
Cordialmente.
XMario Aurelio Cardenal Poli